Una tradición viva desde San Luis del Palmar
Nuestra Identidad
Somos pueblo, música y fe. Cada año, miles de fieles caminan desde San Luis del Palmar hasta Itatí, manteniendo viva una de las expresiones culturales más significativas del litoral argentino. El chamamé acompaña los pasos de los peregrinos, recordando que esta identidad no se limita a la religión, sino que también se nutre del arte, la danza y las tradiciones orales transmitidas de generación en generación
La peregrinación a la Virgen de Itatí se remonta a principios del siglo XX, como una muestra de fe popular y agradecimiento. Desde entonces, se ha convertido en un evento que reúne música chamamecera, devoción religiosa, comidas típicas y la fuerza del pueblo caminante. Con el paso de los años, la peregrinación se consolidó como Patrimonio Cultural de la provincia de Corrientes, convirtiéndose en un símbolo de resistencia y unidad. Cada paso hacia Itatí es un acto de amor y una forma de mantener viva la historia de un pueblo que nunca olvida sus raíces
La comida es energía y tradición. Durante la caminata, se comparte chipá cuerito, sopa paraguaya, torta parrilla, y carne a la estaca, preparados por cocineras y familias del pueblo. El avío no es solo alimento, es también símbolo de solidaridad. Compartir un mate, un chipá o un guiso caliente en medio del camino fortalece los lazos de fraternidad entre los peregrinos. Así, la gastronomía se convierte en parte esencial de la experiencia, llevando consigo el sabor del litoral.
La Basílica de Itatí es el destino sagrado que da sentido a la peregrinación de San Luis del Palmar. Declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la provincia de Corrientes, esta tradición centenaria es un potente ritual colectivo que renueva lazos sociales y la fe en la Virgen. La llegada al majestuoso santuario no es solo el final de un viaje, sino el acto supremo donde la comunidad, cargada de sacrificio y esperanza, reafirma su identidad y cumple su promesa.